martes, 14 de octubre de 2008

Reportaje ciberepistolar a Martín "Rulo" Merlino, por Pupita La Mocuda

“…Si estos tiempos son de queja, de yugo y mala sangre
Le pido se fije y ande tratando de no olvidar;
Una de cal y una de arena, penas, murga y carnaval…”

Luego de la debacle que significara para los derechos civiles la década de los años setenta, en el decenio siguiente la Argentina registra un proceso de reactualización de los derechos políticos a partir de la transición a la democracia. Sin embargo, esto trae aparejado el debilitamiento del aspecto colectivo y comunitario – la sociedad no puede representarse como un todo diluyéndose la idea de lo común – que en la década de 1990 tendrá como corolario la destrucción de los derechos sociales. No únicamente aumentan la desigualdad y la pobreza sino que se hará más intensa la polarización social.
Tanto a nivel nacional como planetario - aunque al caso argentino deben sumársele los devastadores efectos del terrorismo de estado - los procesos de desregulación económica producen una fuerte dinámica descolectivizadora, que significan para numerosos individuos y grupos sociales la entrada en la precariedad, si no la pérdida de los soportes sociales y materiales que durante décadas habían configurado las identidades sociales. Se abre una fase en la que las inequidades s se multiplican y las seguridades se dislocan. Se evidencian claramente el deterioro, la descomposición y el desencantamiento de los magmas de sentido colectivo. Algunas visiones van a enfatizar la cuestión de la desafiliación, la anomia y la ruptura de marcos integradores como causantes de déficits identitarios y graves fracturas sociales.
Al estallido de las identidades construidas en torno al trabajo, el partido político y la nacionalidad debe adosársele la construcción de nuevas identidades por parte de los movimientos sociales, tanto en la elección del marco de referencia como de las institucionalidades y tipos de ciudadanía que generan. La globalización y el auge de la multiculturalidad – o la interculturalidad – van a desplazar las construcciones identitarias de sus anclajes y van a reemplazarlas por pertenencias heterogéneas y autónomas. Estas características impactarán en las instituciones y organizaciones sociales a partir de una demanda por mayor horizontalidad, menor burocracia y democratización, que se combinan con el peso que adquieren las nuevas subjetividades.
Ante este panorama las murgas argentinas contemporáneas - conglomerados de tipo artístico pero que desde la perspectiva que analiza su estructura y organización constituyen nucleamientos humanos productores de sentido e identidad a partir de prácticas sociales compartidas y la recuperación de saberes vinculados al pasado artístico barrial o ciudadano - constituirán pequeños pero sólidos oasis en los cuales (re)crear y afianzar lazos, reconstruir relaciones interpersonales dañadas hasta lo indecible, regenerar entre las personas condiciones de confianza y solidaridad perdidas y prolongarlas en el tiempo. Sólo si un alguien puede percibir su consistencia y su continuidad tendrá capacidad para construir su propio guión de la realidad social y construir su futuro.


Reportaje ciberepistolar a Martín "Rulo" Merlino,
uno de los directores y fundadores del Centro Murga Pasión Quemera de Parque Patricios
Por Pupita La Mocuda
(del Blog Sostengan que nacemos)


- El nacimiento de Pasión Quemera se produce a mediados de la década de los noventa, ¿no es cierto, Martín? ¿Cuál es la configuración particular que permite ese nacimiento? ¿Vos fuiste protagonista de su gestación? Recuerdo una actuación de fin de año en la sala teatral del Centro Cultural Ricardo Rojas en la que ustedes participaron. Pero, a su vez, Pasión Quemera tiene una impronta barrial fuerte que es muy interesante explorar.
- Si, es así. Exactamente en junio de 1994 comenzamos a formar lo que es hoy Pasión Quemera. Pero, en ese momento, la idea era armar algo novedoso para la tradicional fiesta de Año Nuevo que aún hoy seguimos organizando en la intersección de las calles Elía y Grito de Asencio en Parque Patricios sur casi al límite con el hermano barrio de Pompeya. Hasta ese entonces con un grupo de amigos, amigas y vecinos veníamos armando esta fiesta desde mediados de los ochenta. En los últimos años, además de la Quema del Muñeco que representaba al año que se iba y del posterior baile popular, comenzamos a incluir algunos números humorísticos musicales donde nos disfrazábamos parodiando a determinados grupos. Fue así que recuerdo haberme disfrazado (aunque algunos no lo puedan creer dado mi supuesto perfil de persona seria, ja ja) de indígena, de escocés, de bailarina de cumbia , de bailarín de ballet, siendo esto, quizás, un antecedente carnavalero a la etapa murguera dado que mi contacto previo con lo murguero y con el carnaval lo recuerdo como espectador de algunas murgas y comparsas en Avenida de Mayo y en la localidad bonaerense de Benavídez, donde vivían mis abuelos, y de los juegos con agua en mi barrio. Luego, el 1º de enero de 1995, llegó la murga. En este caso, aunque iba a ser sólo por esa vez, lo tomamos muy seriamente y estuvimos ensayando los seis meses previos a esa fecha. Principalmente lo que gestó a la murga fue un fuerte sentido de pertenencia al barrio y lazos de amistad y de mucha unión con amigos y amigas que nos conocíamos desde chicos aunque también participaron más desde afuera otra gente que no era de allí que también estuvo en ese debut de la murga. Nuestra idea fue la de llevar un pedazo de nuestro barrio y de nuestras vivencias dentro de él a muchos otros barrios y lugares a veces diferentes y a veces parecidos al nuestro.
- Aun cuando Pasión Quemera no se vincule directamente con el Club Huracán, el nombre y los colores remiten a él. ¿Cuáles son las implicancias de esta relación si es que puede decirse que hay alguna? ¿Tiene que ver con el fútbol en sí, con el barrio, con una inspiración del momento o con alguna otra cosa?
-Por supuesto que es innegable que el nombre y más que nada los colores remiten al Club Atlético Huracán. No se puede omitir que el Globo
[i] es el símbolo y mayor representante del barrio de Parque Patricios[ii] pero cuando se fundó la murga la elección surgió casi naturalmente aunque siempre aclaramos que lo de “quemeros” se lo debemos al antiguo nombre con que era conocida esta zona de la ciudad, “el barrio de la quema” por la quema de basuras que existía en donde se instaló el actual estadio de Huracán y no sólo por el apodo que tenemos los hinchas de este club. Sabíamos de la implicancia de ese nombre y de los colores pero también sabíamos que lo que queríamos y seguimos queriendo con la murga es totalmente diferente a lo que habitualmente se asocia con lo futbolístico, como lo es la violencia, la división, la búsqueda de un enemigo y podemos decir que al vernos bailar y cantar nuestras canciones, oír nuestras letras y nuestra propuesta estas confusiones desaparecen inmediatamente. Por lo menos eso es lo que comprobamos a lo largo de estos casi catorce años de vida en los que no hemos tenido ni un solo incidente relacionado con ese aspecto. No obstante, algunas veces participamos de eventos realizados por el club y hasta bailamos dentro del estadio en algunos partidos, es que indudablemente somos muchos los hinchas del club dentro de la murga y el sentimiento siempre tira, generalmente lo discutimos bastante porque siempre queremos cuidar que nuestra imagen no quede pegada a la de ser “la murga de Huracán” como sí ocurre en otras instituciones que sostienen y apoyan a sus propias murgas. Nosotros somos absolutamente independientes pero no estamos ajenos a las fiestas populares del barrio en las que Huracán está muchas veces presente. También somos conscientes de que para mucha gente del barrio e hincha del club constituimos un referente importante y muchas veces se mezclan las cosas pero siempre tratamos de aclararlo.
- Igualmente – y esto es una opinión personal y, como tal, debatible – hay préstamos importantes en cuanto a una cierta estética compartida entre murga e hinchada (por ponerle un nombre al fenómeno extra-deportivo que rodea muchas veces al juego mismo). ¿Estás de acuerdo con esto? Sobre todo en estos últimos tiempos, hay una modalidad murguera en crecimiento en la Argentina y que se vincula de forma directa al fútbol, del estilo de los pioneros en esto, la murga de Vélez Sarsfield. He estado viendo por internet, por ejemplo, en las parcialidades de equipos mexicanos, lo que allí denominan “murga de cancha”, un fenómeno muy particular que incluye, increíblemente, el bombo con platillo porteño.
- Si, es verdad, Pupita. La estética en los dos ámbitos es muy parecida sobre todo en los últimos años cuando el bombo pudo retornar a los estadios de fútbol luego de mucho tiempo de estar proscripta su presencia en las hinchadas por considerarlo un elemento peligroso. Se decía que dentro del bombo se guardaban armas o drogas. Mucho tuvo que ver, para mi, la aparición masiva de las murgas y su aceptación en todos los barrios y las hinchadas, en las cuales también hay murgueros, retomaron este instrumento que le da un clima más festivo a las tribunas, junto con las sombrillas y las banderas. También a través de la televisación del fútbol argentino a otros países, primero nos copiaron las canciones y luego toda la disposición de las hinchadas en las tribunas, con su ubicación central, las posturas clásicas en el para-avalancha y la utilización del bombo con platillo porteño en algunos casos y de otros instrumentos percusivos similares en otros.

- ¿Cómo es la conformación actual de Pasión Quemera? ¿Ha sufrido algún cambio o vuelco en estos casi quince años de vida o solamente aquellos que tienen que ver simplemente con el paso del tiempo?
- Si, por supuesto que hemos sufrido muchos cambios de distintas índoles. En el comienzo éramos un grupo mucho más homogéneo ya que nos conocíamos todos de chicos y vivíamos una historia más o menos parecida. Luego, al ser el ingreso libre a la murga, se incorporó mucha gente de distintos orígenes y distintas realidades y eso nos fue cambiando, como fue cambiando la realidad social del país. La murga es un reflejo del barrio en que se desarrolla y crece y el nuestro es un barrio con muchos problemas sociales y económicos, como la mayoría de los barrios del sur de Buenos Aires. Por eso es que desde adentro tratamos que esas cosas no interfieran en el funcionamiento y, en la medida de lo posible, tratamos de ser un grupo de contención social para muchos pibes que se acercan y que sufren problemas de conducta como lo son la droga, la violencia, etcétera. En estos tiempos que corren, tener un grupo grande de personas juntas (nosotros no somos una murga de las más numerosas pero en Carnaval sacamos alrededor de ochenta integrantes) en un espacio público tan libre como lo es una murga y que funcione medianamente bien, ya es un milagro. Igualmente tratamos de crear un espacio de buena convivencia y de integración, obviamente desde las pocas herramientas que tenemos ya que sólo somos murgueros que nos juntamos para bailar y cantar.
- ¿Cómo describirías el estilo organizativo de la murga, la manera de tomar decisiones o de llevarla adelante?
- Desde que se fundó la murga, siempre tuvimos un estilo horizontal en la toma de decisiones, desde el nombre y los colores hasta qué canciones se cantan o en qué lugares baila o no la murga. Todo es decidido por el grupo. En un principio era más fácil porque éramos menos integrantes pero con el correr del tiempo y el crecimiento de la murga, muchas veces se nos complicó la cosa y tuvimos, como todos los grupos, nuestras crisis. Alguna gente no entendía esto de hablar todo entre todos, votar algunas cuestiones importantes y que tenga voz y voto todo aquel que se suma a la murga. Muchas veces hubo personas que pedían que las decisiones pasaran por una sola persona, “El Director”. Muchas veces, cuando se suma el grueso de la gente en lo meses previos a Carnaval, no hay tiempo de explicar convenientemente el funcionamiento interno y las normas de convivencia que sostenemos, lo que sí tratamos de hacer durante el resto del año. “El Director” es una figura que nosotros tenemos dentro del grupo pero en forma simbólica. Es más que nada la cara visible, el coordinador de las actividades, el que lleva adelante y supervisa lo decidido por la murga más allá de que esto, pueden y deben hacerlo todos. Generalmente, es el que más labura y está siempre a disposición y pendiente de la murga. Esta figura surge naturalmente dentro del grupo aunque algunas veces lo hemos votado. También es el que decide en algunas situaciones límite en la que no se puede consultar al resto por distintas cuestiones. Igualmente, en estos casi catorce años de vida no han sido más de tres o cuatro.
- ¿Cómo se inserta Pasión Quemera en el rico y complejo mundo murguero contemporáneo? ¿Cuál es la relación que sostiene con agrupamientos más generales del estilo Agrupación M.U.R.G.A.S., el Frente Murguero o el Movimiento Nacional de Murgas?
- Desde hace varios años no participamos en forma activa de agrupaciones de murgueras. En un principio estuvimos en M.U.R.G.A.S.
[iii], de donde nos retiramos luego de un conflicto por el tema de los colores aunque siempre nos interrelacionamos con varias murgas amigas con las que mantenemos un ida y vuelta en cuanto a acciones más específicas, tanto artísticas como sociales.
- ¿Recordás a qué se debió esta cuestión de los colores? Intuyo que pudo tener que ver, por ejemplo, con que alguna otra agrupación pedía exclusividad en cuanto a su participación excluyente en la “escala cromática”…
- Tuvo que ver con que otra agrupación nos exigía el cambio de los colores por considerarlos exclusivos para ellos y no sentimos el apoyo de otras murgas salvo unas pocas. Lo paradójico es que existían otras que también tenían esos colores pero el reclamo era sólo a nosotros. Pero es un tema ya terminado aunque no fue lo único. Había otras cuestiones de funcionamiento de la agrupación que sumadas a esta nos hizo tomar esa decisión.
- ¿Y en cuanto a los demás agrupamientos?
- Hace unos años junto a Los Verdes de Monserrat y Los Amantes de la Boca armamos Murgas del Sur, con quienes hicimos varias actividades relacionadas con la memoria de las víctimas del golpe militar de 1976, principalmente de la zona sur de la ciudad y en especialmente en el centro clandestino de detención conocido como “El Atlético”.[iv] También con algunas murgas de nuestro barrio y de los vecinos barrios de Pompeya y San Cristóbal hicimos varios encuentros murgueros con fines solidarios y con las cuales presentamos varios petitorios en los C.G.P.[v] de la zona para pedir colaboración con nuestra actividad. Con menos presencia también participamos del Frente Murguero[vi] mientras funcionó y actualmente nos estamos vinculando un poco más con algunas murgas independientes de Capital Federal y de la Provincia de Buenos Aires. Donde creo que nos está faltando participación es en el Movimiento Nacional de Murgas.[vii] Por ejemplo, recién el año pasado, un grupito de nuestra murga viajó a Suardi [viii]aunque este año pensamos viajar la mayoría. Es un tema difícil porque para participar de estas agrupaciones, y a pesar de que nos interesa, se necesita un gran compromiso y presencia frecuente en las reuniones y la mayoría de nosotros por temas de trabajo y estudio más las cuestiones propias de la murga no disponemos de mucho tiempo. A pesar de todo esto siempre estamos en contacto con muchas murgas del país y de distintas agrupaciones y movimientos murgueros de los cuales siempre recibimos invitaciones e información de las temáticas que tratan.
- ¿En que ha quedado el agrupamiento Murgas del Sur? ¿Siguen teniendo contacto?
- Seguimos teniendo contacto con Los Verdes, más que nada por la amistad que tenemos con ellos. Siempre nos invitan a su corso o cerramos carnavales ahí cuando podemos. Para los 24 de marzo
[ix] cuando coincidimos en alguna actividad cantamos la canción que hicimos juntos para esa fecha. Los Amantes lamentablemente no están saliendo actualmente.
- ¿Te parece que este tipo de agrupaciones de estilo macro como el Frente Murguero sufren desgaste con el tiempo o es todavía muy reciente para decir tal cosa? El Frente Murguero, por ejemplo, supo tener una presencia fuerte pero se fue diluyendo. ¿A qué lo atribuís? Igualmente, estas distintas formas de juntarse son totalmente contemporáneas, todas ellas surgen en estos años… ¿Crees que tienen futuro o son simplemente coyunturales?
- Creo que son agrupaciones más dinámicas que se transforman y se rehacen todo el tiempo, sobre todo en relación a los murgueros que las impulsan de acuerdo a sus vidas personales y su disponibilidad de tiempo. Varios de los que participaban en el Frente ahora conforman el grupo de murgas independientes que ha tomado mucha fuerza últimamente. El ámbito murguero es muy diverso y siempre va a ver personas que piensen de diferente manera y quienes coincidan seguramente van a estar juntándose en una u otra agrupación mas allá de los nombres que tengan. Todos los grupos sufren un desgaste lógico y su continuidad depende de sus dirigentes y de las bases que vayan sustituyéndolos para que se mantengan en el tiempo. M.U.R.G.A.S. es un ejemplo de continuidad ya que hace mucho tiempo que viene trabajando ininterrumpidamente.
- ¿Cuál es la apuesta estético-artística de Pasión Quemera? ¿Con qué otras murgas de este momento histórico y con la tradición murguera te parece que dialoga tanto de nuestro país como a nivel más regional, por ejemplo, lo rioplatense en sentido amplio?
-
Te cuento que en principio cuando empezamos con esto, como toda murga nueva nos fijábamos en otras murgas con trayectoria. En ese momento, allá por 1994, no existían tantas murgas como ahora, por supuesto, y una de las primeras murgas que vimos fueron Los Viciosos de Almagro[x], que a mí particularmente siempre me gustaron mucho y me siguen gustando, especialmente la identificación tan profunda con su barrio y además por sentirlos muy auténticos en todo aspecto. Por otro lado también vimos varias veces a Los Quitapenas[xi] pero ya en otro estilo totalmente distinto y apuntando a una estética mas elaborada. Nosotros con todas nuestras limitaciones de los que recién empiezan, tratamos de hacer algo auténtico y barrial. Creo que lo fuimos logrando a pesar de no tener los mejores cantores, bailarines o bombistas. Fuimos mejorando bastante con el tiempo, más viniendo de un barrio que no tenía una tradición murguera en la cual basarse.[xii] Con el ingreso de gente con gustos e historias diferentes dentro de la murga se fueron conjugando distintas características y, si bien había algunos a los que nos gustaba más lo tradicional, siempre quisimos hacer algo lo más original posible pero tratando de respetar el espíritu del género. Por eso buscamos siempre melodías nuevas para las canciones saliendo así de las clásicas que usaban las murgas desde siempre. Por supuesto que en los últimos años esto viene cambiando con la cantidad de agrupaciones que surgieron, muchas de ellas muy innovadoras y muy buenas. Para mí la murga está muy emparentada con el tango, y sus hermanos musicales, el vals y la milonga, cosas que a mi me gustan mucho. Pero sé también que se hace difícil mantenerlos tan presente en el repertorio como sí se hacía antes cuando el tango era la música popular por excelencia y en cada casa se lo escuchaba y nacían y se criaban cantores con esa música. Hoy eso ya no ocurre. Entonces es difícil encontrar esos grandes cantores que imitaban, en las murgas, a los del tango. Cuando tuvimos un cantor de tangos en el escenario, nuestro repertorio estaba más inclinado a esas melodías, más vals y milonga; luego con la dinámica de la entrada y salida de gente se armó un grupo más coral y se incorporaron arreglos de voces en las canciones. Aun así, seguimos, en menor medida, haciendo también algo del repertorio tanguero. Hoy están apareciendo nuevas y buenas voces pero al no tener una escuela en el canto de murga porteña en la cual reflejarse y aprender, muchas veces se cae en un estilo más emparentado a lo uruguayo y a veces se confunden un poco las cosas. Nosotros mismos hemos laburado canciones con un arreglador uruguayo, Alejandro Balbis.[xiii] Hace varios años ya de esto y en algunas ocasiones alguna gente nos dijo que sonábamos algo parecido a ese estilo. Obviamente, podría haber alguna influencia pero seguro que jamás podríamos cantar como ellos ni nos interesa hacerlo a pesar de que a muchos también nos gusta la muga uruguaya. Igualmente, esa experiencia nos sirvió mucho para crecer y dentro de la murga surgieron los nuevos arregladores y hasta creadores de melodías propias para nuestras canciones. En cuanto a la percusión seguimos pensando en el bombo con platillo como instrumento por excelencia, pero a veces lo acompañamos con algún redoblante. Gracias a un gran bombista que tenemos en la murga – Alejandro Caraballo, que grabó con Prat, Cáceres, la Bersuit – incorporamos ritmos y cortes nuevos para salir un poco de lo más clásico, que no descartamos por completo. Esto mismo lo tratamos de aplicar al movimiento buscando siempre pasos y figuras nuevas para el desfile, dejando libertad para el baile libre y las demostraciones o matanzas. Con respecto a la ropa, somos bastante tradicionales. Usamos levita clásica, pantalón, camisa, moño, faja, guantes y galera para todos. Lo mismo para las fantasías de la murga: llevamos banderas, sombrillas, dados, abanicos y muñecos. Creo que seguimos buscando nuestro estilo entre lo heredado de la tradición y lo novedoso que podamos aportar las nuevas generaciones.
-
Esta es una problemática muy compleja más teniendo en cuenta los quiebres tan profundos sufridos por este género en la Argentina ¿Vos crees, entonces, que indefectiblemente vamos hacia la hibridación, la mezcla de estilos? ¿Es inevitable la transacción entre la innovación y lo que se trae como tradición?
- Creo que vamos a tener de todo: las murgas que tengan arraigada una tradición muy fuerte seguirán con el género mas puro en la medida que trasmitan esa herencia a sus nuevos murgueros y hay otras que tomarán un poco de cada cosa agregándole visiones particulares y quizás otras vendrán con algo totalmente nuevo y que seguro muchos no considerarán murga. El tiempo dirá cómo se acomodan de acuerdo a las reglamentaciones que existan, por ejemplo, como para participar del carnaval oficial de la ciudad de Buenos Aires o crearán sus propios ámbitos en forma independiente si hay algunas limitaciones. Cada uno podrá elegir su estilo como así también el público puede hacerlo. Yo creo que el estilo de murga porteña es uno solo con pequeñas variaciones entre alguna agrupación u otra. Pero es algo que siento muy adentro cuando veo a una murga. Sé si le creo o no. Es un sentimiento muy particular muy difícil de explicar por lo menos para mí. Tampoco sé si es justo exigírselo a toda la gente que va a ver a una.
- Entiendo perfectamente esa sensación y sé que puede resultar difícil describirlo en palabras. ¿Pasión Quemera es sóla y únicamente lo que suele denominarse un producto artístico? ¿Cómo entran – si es que lo hacen – a jugar en Pasión Quemera dos aspectos que suelen ser constitutivos en cierta concepción contemporánea de la murga como lo son lo social y lo político?
- En algún momento, hace varios años, esto se debatió dentro de Pasión Quemera y quedó claramente definido que la murga, por lo menos para nosotros, tiene que tener en cuenta dos aspectos fundamentales, uno el artístico y el otro el social y político, los dos trabajados de la misma manera y con la misma intensidad. En algunos momentos a veces se desbalancea la cosa pero siempre lo vamos corrigiendo. Creemos que es tan importante la propuesta artística como la función social que tiene la murga, tanto para sus integrantes como para la comunidad que la rodea. Por eso estamos pensando siempre en cómo mejorar el espectáculo que damos. Es así que nos preocupamos por la calidad y el contenido de las letras porque creemos que es muy importante lo que se dice. También laburamos bastante el tema de las voces porque creemos que es importante cómo se dicen las cosas. Por eso lo que buscamos en lo posible – aunque que no siempre lo logramos – contenido, belleza, claridad y fuerza en todas nuestras canciones aunque esta búsqueda nunca implica dejar afuera ni discriminar a nadie. Tratamos de incluir a todos de la mejor manera y donde más le aporten a la murga, artísticamente y en lo grupal. Esta, por ejemplo, es Carnaval escrita por Marcelo Barberis:

La otra noche con Yeye quisimos homenajear
A todos esos que dicen que odian al carnaval;
Entonces apareció este ritmo de milonga
Pa´ la gente que rezonga cuando el corso va a pasar;
Para ellos estos versos son parte del carnaval:

“Carnaval, carnaval, sos hijo del arrabal
Si las puertas se te cierran vos bailas en el umbral.” (CORO)

El peluquero barría con ahínco la vereda,
Y al llegar PASION QUEMERA empezó a maliciar;
Juraba que iba a llamar a los hombres de tiritas,
Que iba a poner una bomba y no se cuantas cosas mas;
En vez de bomba fue bombo y se vino al carnaval.

CORO

La vecina que, aguafiestas, no se quería ni asomar,
Quería dormir la siesta y no ver la realidad;
Pero a veces pasan cosas que uno no puede explicar:
Es cuando la sangre sube y dan ganas de bailar;
De pronto paso la murga y ella vino al carnaval.

CORO

El que la iba de serio, acaso de intelectual, decía:
"Falta un proyecto de buena raigambre social";
Hasta que vio entre la murga una boca con un beso
Y pensó que ir tras de eso no estaba del todo mal;
El también enhebró un sueño y se vino al carnaval.

La que se había quedado para vestir unos santos
Batía que era un espanto la pintura y el disfraz;
La que al oír el compás en los pies sintió una cosa
De la vida color de rosa de sus tiempos de mocita,
Archivó su lagrimita y aporto al carnaval

CORO

El viejito caraseria otrora gran futbolero
Broncaba contra estos tiempos con que antes era mejor;
Sin embargo no alcanzó a terminar su pensamiento;
Sonó el platillo y la murga de pronto grito penal.
Con el botín del recuerdo le hizo un gol al carnaval.

CORO

El muchacho de la esquina que era medio timidón
Se asustaba de los bombos, se asustaba del murgón:
Su madrecita querida le había dicho bien claro:
“No te juntes con los vagos de Elía y Grito de Asencio”;
Eñ hombre rompió el silencio: “Yo me voy al carnaval.”

CORO

Esto se acaba, señores. PASION QUEMERA se va
Y les deja de pensar lo que llaman moraleja:
Si estos tiempos son de queja, de yugo y mala sangre
Le pido se fije y ande tratando de no olvidar;
Una de cal y una de arena, penas, murga y carnaval.

- ¿Y en las otras dos cuestiones?
- En lo social somos conscientes de lo importante que es el grupo humano que forma la murga, en principio para sus propios murgueros, ya que es allí donde encuentran la famosa contención y entre todos aprendemos a convivir con las diferencias ya que cada uno de nosotros venimos de distintos niveles socio-culturales y educacionales y tratamos de no repetir, a veces con muchos obstáculos, lo que la sociedad reproduce todos los días. Lo político siempre está presente en todos los actos de la murga: desde lo que se canta hasta en los lugares que la murga decide bailar y no bailar y principalmente en los actos y marchas en las que participamos. Todo esto está acordado desde el momento en que alguien entra en la murga; son principios que se respetan desde los inicios de la agrupación aunque siempre hay que ir apuntándolos y recordándolos.
- Te pregunto ahora sobre algo en lo que suele gustarme indagar de manera especial. ¿Las mujeres se visten o bailan de manera diferenciada de los varones? ¿Tocan bombo? ¿Hay alguna diferencia perceptible entre varones y mujeres con respecto al estilo de participación?
- La vestimenta y el baile son iguales para todos aunque en un momento no fue así. Pero las mujeres, cuando plantearon la igualdad de vestimenta y en el baile, lo consiguieron. Tenemos hombres y mujeres cantando, recitando y bailando. Donde todavía no han incursionado, salvo una excepción cuando estábamos empezando, es en los bombos. Hay alguna que otra mujer que dice que le gustaría pero debo admitir que tenemos cierta reticencia por una cuestión estética o quizás de prejuicio. Pero no es una negativa absoluta. Seguramente con el tiempo llegarán a los bombos. Donde hasta ahora nunca estuvo una mujer es en el rol simbólico de “Director/a” que tiene nuestra murga. Sí hay directoras de baile, por ejemplo, pero se dio en forma natural seguramente por el componente machista que arrastra nuestra sociedad.
- ¿Cómo es la participación de ustedes en conglomerados más circunstanciales del estilo de las marchas por el feriado de carnaval – tales como las que se llevan a cabo en Buenos Aires o en La Plata – o el Encuentro de Suardi?
- Desde un principio hemos participado en las marchas que reclaman el feriado de Carnaval, tanto en la Ciudad de Buenos Aires como en la Ciudad de la Plata. En ambos lugares fuimos, junto a otras, una de las murgas pioneras en participar de estos reclamos y colaboramos bastante en la génesis de ambas marchas, hace ya varios años. Aunque últimamente no tenemos una participación tan activa, seguimos estando en las marchas y también nos hemos sumado a la que realizan las murgas independientes. Con respecto a Suardi, estamos organizando el viaje para este año y por primera vez la idea es que vaya toda la murga. Ya el año pasado fueron algunos representantes por lo que estamos juntando de a poco la plata para pagarnos el viaje.
- ¿Cómo piensan desde ustedes – o cómo pensás vos personalmente – y en este contexto la cuestión concreta de la lucha por el Feriado de Carnaval? ¿Creen que la fragmentación del arco murguero es una limitación o no han pensado este tema?
- Como te decía anteriormente, no estamos teniendo una participación tan activa en los últimos años, un poco por cuestionas internas de funcionamiento nuestro dentro de la murga y otro tanto por esta división que se muestra en el reclamo al realizarse dos marchas por separado. Creemos que este reclamo tan importante tiene que aparecer bien claro y muy fuerte frente a la opinión pública en general y cuando los medios, la gente y los legisladores lo ven por separado es como que pierde un poco de fuerza. Por supuesto que no hay que desentenderse de las diferencias de criterio y también políticas entre los distintas agrupaciones, pero creo, y esto personalmente, que el reclamo debiera estar por encima de toda discusión interna y se debieran discutir las otras cuestiones durante todo el resto del año para lograr un acuerdo, no olvidando la historia del reclamo: quienes y como lo iniciaron. Pero reconociendo y dando lugar a las nuevas murgas que viene con novedosas formas de conducción y de participación y que vienen realizando un gran trabajo en lo artístico y en lo social. Creo que tranquilamente puede hacerse una sola marcha con el reclamo del feriado de carnaval como consigna general al frente de la marcha y detrás los distintos bloques de murgas con sus consignas particulares que se sumen al reclamo principal.
- Esa es una de las formas en que me gusta imaginármelo a mí también. A nivel personal ¿qué alegrías te ha proporcionado Pasión Quemera? ¿Cuál es tu participación en la murga artísticamente hablando?
- Pasión Quemera ha formado parte de mi vida desde hace casi catorce años y me ha transformado como persona, haciéndome conocer mucha gente y muchos lugares que de otra manera no hubiera conocido. Y me ha dado la gran satisfacción de permitirme, a través de la murga, llevar y hacer conocer en otros lugares un poco de lo que es mi barrio, Parque Patricios, un poco de su cultura y de su manera de vivir. Además, me proporcionó la oportunidad de conectarme con lo artístico, a través de la escritura, de la música y de la plástica como así también con lo humano por todas las cosas que compartimos cotidianamente con este grupo de gente en todos estos años. Actualmente formo parte de la percusión de la murga, tocando el bombo con platillo, también colaboro escribiendo algunas letras para las canciones y he formado parte hasta este último carnaval del grupo de cantantes.
- Sos muy afortunado, Martín, al tener recuerdos de carnavales en tu infancia y poder unirlos con tu presente murguero. Me gustaría saber si vislumbrás en Pasión Quemera algo de aquellas murgas y comparsas que recordás haber visto de chico en la Avenida de Mayo y en Benavídez, donde visitabas a tus abuelos. ¿Percibís algún hilo conductor?
- Luego de varios años puedo ver, en alguna proporción, algo parecido a aquellas murgas de Avenida de Mayo pero con una evolución distinta y acomodada a otra realidad, con alguna diferencia en lo estético en las comparsas de provincia. Pero sí seguramente compartimos ese sentimiento tan lindo de desfilar en un corso brindándole el corazón al público que te alienta y aplaude y de respirar ese perfume único y mágico que desprende el carnaval. [xiv]




[I] Denominación que por su emblema de nacimiento recibe el Club Atlético Huracán. “…A medidos de 1909 el ingeniero electricista Jorge Newbery pilotea por primera el globo aerostático “Huracán” traído desde Francia, pero su mayor travesía la realiza ese mismo año, cuando en diciembre sale piloteando el globo Huracán, desde el barrio de Belgrano hasta ciudad brasileña de Bagé. Dicho hecho inspiró el distintivo del club. En un acta de 1910 se deja constancia de que se usará, camiseta blanca con la insignia del globo Huracán. En mayo de 1911 la Comisión Directiva del club designó socio honorario a Jorge Newbery y luego lo convirtió en el primer presidente honorario. Cuando el Club Huracán alcanza la categoría más alta del fútbol argentino (1914) se le envía un telegrama al ingeniero Newbery diciendo: “Hemos cumplido, el Club Atlético Huracán, sin interrupción conquisto tres categorías, ascendiendo a primera división, como el globo que cruzó tres Republicas…”
Fuentes:
http://www.clubahuracan.com.ar/index.php?mod=nacimiento
http://www.clubahuracan.com.ar/index.php?mod=emblemas
http://tdplata.tripod.com/historia/
[II] Historia del barrio de Parque Patricios en: http://www.nuevociclo.com.ar/elbarriodeparquepatriciosporaniballomba.htm
http://www.barriada.com.ar/ppatricios.htm
http://www.huracanysugente.com.ar/historia%20Parque%20Patricios.htm
[III] Se refiere a la Agrupación Murgas Unidas Recuperando y Ganando Alegría Siempre (M.U.R.G.A.S.), nucleamiento de murgas de Capital Federal surgido en la década de 1990. Para datos testimoniales ver “Soy Cometa”, reportaje a Gustavo “Tavi” Antón por Pupita La Mocuda en este mismo blog. Web de la Agrupación M.U.R.G.A.S.: http://www.agrupacionmurgas.com
[IV] Centro clandestino de detención en Capital Federal que funcionó durante la última de las dictaduras militare en la República Argentina: Ver:
http://www.clarin.com/diario/2002/05/08/p-02101.htm
[V] En referencia a los Centros de Gestión y Participación de la Ciudad de Buenos Aires.
[VI] El agrupamiento de murgas Frente Murguero tuvo destacada participación durante los primeros años de la presente década. Ver:
http://www.panuelosenrebeldia.com.ar/content/view/648/70/
[VII] Alude al espacio de murgas que se denominan independientes surgido en los últimos años. Ver:
http://www.murgargentina.com
[VIII] El Encuentro Nacional de Murgas en Suardi se lleva a cabo anualmente y congrega a gran parte del espectro murguero contemporáneo. Consultar:
http://www.murgargentina.com.ar
[IX] Es la fecha en que se derrocó al gobierno de María Estela Martínez de Perón en el año 1976. Todos los 24 de marzo se conmemora el repudio a la dictadura que allí tuvo comienzo.
[X] Centro Murga Los Viciosos de Almagro. Ver reportaje en este mismo blog a Héctor y Osvaldo Cicero por Pupita La Mocuda. Se puede consultar también:
http://www.losviciososdealmagro.blogspot.com
[XI] Ver: http://www.murgalosquitapenas.com.ar/

[XII] Con respecto a esto es el mismo Martín Merlino el que arroja luz sobre el arduo y sinuoso viaje de la memoria colectiva refiriéndose y aportando datos sobre la última expresión carnavalera que se recuerda en Parque Patricios – la murga Los Nenes de San Francisco – con anterioridad a ella. Su contribución incluye referencias concretas de corte artístico sobre esta agrupación conservados y acercados por uno de sus integrantes, el Sr. Pipo Ingegnieri, miembro, a la sazón, de Pasión Quemera. Nota completa en:
http://dalemurga.blogspot.com/2007_12_01_archive.html#6745212342294362234
[XIII] Breve reportaje a Alejandro Balbis en: http://www.lasmurgas.com/html/articulo_jordi.htm¨
[XIV] Fotografías aportadas especialmente para esta entrevista por Martín Merlino excepto la última cuya fuente es:
http://www.clubahuracan.com.ar/index.php?mod=nacimiento

viernes, 13 de junio de 2008

Antiguos Carnavales


La reconstrucción de la memoria colectiva no es tarea sencilla, sobre todo si de lo que se trata es de registrar aquellas voces recónditas, silenciadas y subsumidas en el olvido por quienes sí - por pertenecer o haber pertenecido a segmentos social o políticamente dominantes - han tenido más oportunidades para dejar testimonio y manifestar sus pensamientos y sus recuerdos y han utilizado su predominio para suprimir, eliminar o desaparecer versiones subalternas o contrahegemónicas de la realidad. Pero aun en la dificultad, las tramas pueden volver a tejerse gracias a la voluntad de poner en común lo que todavía hay para arrancarle al silencio. Siempre hay otra historia.
Relata Martín del Centro Murga Pasión Quemera de Parque Patricios:“Este es un viejo afiche del recordado Teatro Nilo, por donde pasaron muchas murgas. Incluso algunas de las mencionadas allí siguen existiendo en la actualidad como Los Dandys de Boedo y Los Cometas de Boedo. Este recuerdo lo guardaba un viejo vecino de Parque Patricios, Pipo Ingegnieri, que sale con nosotros en la murga y que participó de la última expresión murguera recordada en nuestro barrio y que data de 1966, la murga Los Nenes de San Francisco (antiguo nombre de la actual calle Diógenes Taborda, de donde salía la murga en su intersección con Grito de Asencio, justamente la calle que, en su intersección con Elía, es cuna de Pasión Quemera). Este vecino también nos acercó hace unos años una letra de las canciones "picantes" (1) que cantaban en aquella época para tirar la manga y que bautizaron como "el Tilín Tilín" y que actualmente hacemos nosotros cada tanto a modo de homenaje. Creo que merecen engrosar el patrimonio histórico murguero de esta ciudad.”

EL TILIN TILIN


Con el tilín, tilín,Con el tilín, tilán,Con el tilín, tilín,Tilín, tilín, tilán
En el circo de mi barrioOcurrió algo fatal:Resulta que ha muerto un monoPegando un salto mortal.
El dueño del circo ahoraLos hace cambiar de tonoY en la próxima funciónQuien me hace la del mono.
Una chica de mi barrioDe ocupacion tejedoraFue a solicitar trabajoEn una temprana hora.
El capataz le preguntaQue clase teje de tela:- Mire yo le hago de todoPero en especial franela.
Se divorcia el panaderoPues una cosa le pasaAgarró a su señoraCon las manos en la masa
Es que ella funde el negocio;Es mano suelta y no mideY le regala el pan dulceA todo el que se lo pide.
Una camioneta en casaYo tenía estacionadaY me hicieron la boletaPor dejarla allí anclada.
¿A usted le parece bienSemejante atropellada?¡Hacerme la boleta a míporque la tenía parada!
Bueno esto ya termina,No se vayan a enojar;Son cositas que decimosSolamente pa’ alegrar
Pasión Quemera recuerdaA los murgueros del barrio,Esos que hicieron la historiaY no salieron en los diarios
Les cantamos con orgullo,Les bailamos con pasiónA los súbditos de MomoSiguiendo la tradición.

Letra: Anónima


(1) Se refiere a uno de los intercambios que tiene lugar en el Grupo de Debate ¡Dale Murga! acerca de las canciones "picantes" o de doble sentido que las murgas solían y suelen todavía tener en su repertorio.


Compilación y edición de Pupita La Mocuda

domingo, 1 de junio de 2008

Historia de la murga Pasión Quemera


Historia de la murga Pasión Quemera



Por Graciela Brun, quien hizo un trabajo llamado "Murga barrial Pasión Quemera: Organización, historia y proyectos".
Publicado originalmente en http://parquedelospatricios.blogspot.com/, por gabriel giubellino



Esta joyita del barrio fue presentada por Graciela, ahora profesora y licenciada en Folklore, en marzo de 2005 para la cátedra Metodología de la Investigación Folklórica y Folcklore Aplicada del Instituto Universitario Nacional del Arte. Y tuvo la delicadeza de acercarlo a este blog.Graciela hizo un trabajo de recolección de datos en el lugar de nacimiento de la murga, durante las presentaciones y lugares de ensayos. Martín Merlino, director de la murga, fue una de sus fuentes. Entrevistó también a Oscar Sassini, un vecino del barrio que había integrado otra murga, la comparsa Los Nenes de San Francisco, que sólo actuó en 1966. Sassini es el hombre de la foto en blanco y negro.



Esta foto-hallazgo, de 1966, fue rescatada del álbum de Oscar Sassini por Graciela Brun.



Buscó en la historia de la murga, nacida en junio de 1994 para organizar los festejos de fin de año.




Mostró con un mapa de 1887 la relación del nombre de la murga con la historia del barrio, cuando el Ferrocarril de las Basuras lo atravesaba para llevar los residuos de la ciudad hasta "la Quema".







Ubicó al Centro Murga en un mapa actual.





Explicó que la murga es independiente del club Huracán, aunque muchos sean hinchas de Huracán, y la Pasión Quemera se extiende en este barrio en todo aquel que tenga sangre en las venas, sea cual sea su cuadro original.Registró la construcción grupal, tanto en las letras como en el armado del "cabezón", el muñeco gigante que representaba a Ringo Bonavena, como también en la restauración del mural "La esquina del tango", bautizado en 1995, en los 60 años de la muerte de Carlos Gardel. En ese momento nació el Teatro de la Goma, ligado a la murga PQ.Resaltó el trabajo social que hace el grupo y su apoyo a los reclamos por los derechos humanos.


Como corolario de su trabajo, Graciela escribió:
"El barrio a través de ellos mantiene su autenticidad y al del carnaval, donde perviven la comunicación personal y el paso a generaciones siguientes de su origen popular. El barrio, su historia, su gente, se transforma en un polo de atracción por su intermedio".A once años de su gran trabajo, Graciela me contesta unas preguntitas:
"Lo que más me gustó en primer lugar (que fue mi disparador) fue la confección y mantenimiento del mural. Como me gusta la música y todo lo relacionado con el arte (foto, dibujo, fileteado, etc) y me gusta Gardel, tenerlo retratado en el barrio, hace que uno tenga presente el origen tanguero del mismo, y embellece un poco, la bastante afeada zona sur de la ciudad".


"El trabajo lo hice para la última materia de la facultad (Metodología de la Investigación Folklórica) de la carrera Licenciatura en Folklore con mención en Danzas.Como yo soy de Bs. As y viví siempre en el barrio, no podía investigar un tema que estuviera relacionado con el folklore del interior del país, pero sí con el ciudadano. Fue así que surgió el mismo.Me llevó alrededor de un año, entre la organización, entrevistas, visitas y fotografías en los lugares de ensayo y reunión del grupo, y por último las diferentes actuaciones, tanto en nuestro barrio como en La Boca. Exceptuando las primeras fotografías del mural y de la presentación en el Club Piraña, que fueron tomadas por tener espíritu de fotógrafa, diez años atrás.
Para el trabajo hice dos entrevistas al director de la murga, mientras se realizaban algunos ensayos en la plaza barrial durante el año 2004, más las fotografías y dibujos de la zona que hice durante los meses de verano del 2005 en las presentaciones del carnaval. (Las fechas de las presentaciones deben estar en el trabajo, que son el 6 de febrero en la Av. Caseros, el 8 ó 9 de febrero la marcha en Plaza de Mayo por el reclamo del feriado nacional, y la 7ma presentación del “Corso de las Ranas” el 11 de febrero.


También la entrevista a Oscar Sassini (de la antigua murga, de la década de los 60. Foto) la hice durante el año 2004.Este señor es vecino del barrio y tiene una típica tiendita de ropa heredada de su padre (inmigrante de origen turco)

El trabajo lo presenté en la facultad a la profesora titular de la cátedra Ma. Azucena Colatarci.
Otro de los motivos que me sorprendió fueron las motivaciones para la organización de las murgas. La de antaño tenía un carácter más festivo, alegre y estaba presente esa picardía por competir en los corsos. Mientras que la de ahora, entre otras cosas, se propuso ocupar los lugares comunes del barrio, y con ello tratar de sumar a los chicos del mismo, con una actividad más productiva que la de estar reunidos en la plaza tomando cerveza u otras cosas y perdiendo el tiempo (según lo expresado por el chico que coordina las actividades de la murga) De esta manera la plaza, la esquina o el lugar donde se encontrara el grupo, tenía otra finalidad, organizar el baile, practicar pasos, ritmos, diseñar trajes para llegar a las fechas del carnaval".